Rin Raje. By Pepe

Anécdotas
En la ciudad de Riga, al llegar dejé olvidado el wiski y el caviar en la vereda. Creo que todavía estará disfrutando el que los encontró y también todavía me están insultando los compañeros de viaje. Pero creo que se lo merecen, porque el departamento alquilado era dentro de un edificio de tres pisos sin ascensor y con una escalera muy cansadora.  La cuestión era que subíamos cargados de las mochilas y demás bártulos, lo cual evidentemente  que yo era el más afectado por ese esfuerzo  y a Horacio no se le ocurrió mejor idea que tocar todos los timbres de los departamento y salir corriendo. Me dejo regalado!!!!!!!.  Tuve que sacer fuerzas de donde no tenía y desaparecer.    Vuelta la cuestión etaria. Y bueno,…… pero como no está muerto quien pelea, el que ríe ultimo ríe mejor.
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